- 1 día: visita rápida al centro histórico, almuerzo en el Mercado Municipal, una vuelta por Avenida Paulista y una tarde en el MASP o el Parque Trianon.
- 2 días: añade una caminata por Liberdade, el barrio japonés, y termina la noche en Vila Madalena con una cerveza artesanal.
- 3 días: suma el Parque Ibirapuera, un paseo en bici, y algún museo como el MAM o el MAC. Ideal para los amantes del arte.
- 4 días: ya puedes considerar una escapada a Santos o Praia Grande, disfrutar de sus playas y relajarte.
¡Y si tienes una escala en São Paulo, más abajo te dejo tips para que aproveches esas horas al máximo!
- Vila Madalena: ideal para bares relajados y cervezas artesanales.
- Itaim Bibi: rooftops, lounges y bares más exclusivos.
- Augusta: una fiesta continua, desde antros alternativos hasta clubs mainstream.
- Relajarte en un lounge con ducha.
- Comer bien (hay opciones de todo tipo).
- Comprar en tiendas libres de impuestos.
- Si tienes más de 6 horas, haz una escapada al Mercado Municipal o al Parque do Tietê, ambos accesibles en Uber.
- Santos: con su historia portuaria y el Jardín de la Playa (el más largo del mundo).
- Praia Grande: para una experiencia más local, con playas extensas y ambiente relajado.
Una excelente escapada si tienes 3 o 4 días en São Paulo y quieres un respiro del cemento.
- Playas paradisíacas (especialmente la Segunda y Tercera Playa).
- Caminatas al Forte do Tapirandu y vistas mágicas al atardecer.
- Vida nocturna relajada con fiestas en la playa.
No está cerca de São Paulo capital, pero vale totalmente el desvío si sigues explorando Brasil.
- Usa apps como Uber o 99 para moverte con seguridad.
- Siempre lleva efectivo y tarjeta, no todos los lugares aceptan ambas.
- Evita cargar mucho encima en zonas céntricas.
- Tómate el tiempo de observar, caminar y degustar.
- Y lo más importante: ven con la mente abierta.
“Esta ciudad me sorprendió gratamente. Es una ciudad con una energía única… Si vienes con la mente abierta y ganas de explorar, te aseguro que São Paulo te conquistará.”